Cuando pensamos en Smart Cities, lo primero que se nos pasa por la cabeza son las típicas imágenes de ciudades futuristas de películas como Minority Report, Blade Runner o incluso alguna que otra sacada del mundo de los superhéroes. Pero las Smart Cities existen, y vivimos en ellas sin saberlo. Hoy, Jordi Egea, IT Manager en SlashMobility, nos va a contar todo sobre ellas.
empecemos por el principio
La población urbana ha experimentado un gran crecimiento a lo largo de las últimas décadas. Según la ONU, en tan sólo veinte años hemos pasado de 2.300 millones de urbanitas a más de 4.000 millones, y esta tendencia sigue al alza. Se calcula que para el año 2050 alrededor del 70% de la población mundial vivirá en núcleos
¿por qué una smart city?
La necesidad de crear estas ciudades inteligentes viene de la mano de los cada vez más alarmantes datos de contaminación, escasez de recursos y del continuo crecimiento de las grandes urbes. Sin embargo, el hecho de que una ciudad sea inteligente, no significa que sea necesario reconstruirla por completo, ni que tampoco sea un proceso rápido. A día de hoy, no existe un consenso que determine con exactitud cuáles son los elementos que debe tener una ciudad para ser considerada inteligente, aunque sí existen una serie de aspectos importantes:- Base tecnológica: una Smart City debe apoyarse en las nuevas tecnologías para recopilar una gran cantidad de datos, que será necesario procesar y posteriormente compartir en tiempo real para poder generar un valor añadido. Estos datos se recogen mediante miles de sensores y redes colocados en lugares estratégicos de las ciudades.
- Mejorar la calidad de vida: la finalidad de los datos recogidos por los sensores debe ser mejorar la vida de los habitantes de la ciudad y los servicios públicos.
- Crear una visión global de la ciudad: gracias a que la tecnología estará presente en todos los ámbitos de la ciudad, se podrá obtener una visión más global de la misma.
- Mejorar las relaciones existentes: abriendo una mejor y más fluida comunicación entre los distintos integrantes de la ciudad (empresas, ciudadanos, visitantes, inversores, etc.) facilitando así mismo la interconexión con distintas Smart Cities.