IoT (Internet of Things) es un término que está sonando a bombo y platillo como una de las tendencias de mercado más fuertes de los últimos tiempos. Algunos dicen que es el futuro, otros dicen que ya está aquí. Pero cuando oyes estas siglas en una conferencia, ¿sabes realmente qué significan?
El Internet de la Cosas tiene 3 componentes básicos:

- Inteligente y adaptable: cuando los dispositivos IoT aprenden y se adaptan a las necesidades de los usuarios, proporcionan una experiencia que puede eliminar la necesidad de una interfaz de usuario. Los servicios que agregan datos de múltiples fuentes y toman decisiones lógicas proporcionan un servicio transparente para el usuario final. Un ejemplo ideal para este principio es el termostato inteligente Nest, de Google, que adapta la temperatura de tu hogar según tu rutina.
- Diseñado para humanos: Si bien toda la data y algoritmos puede parecer abstracto, diseñar productos y experiencias siempre debe contar con una capa humana. Un ejemplo es el proyecto SPark (Smartphone/Smartwatch System for Parkinson Patients), que mediante Wearables mide la intensidad de los temblores, permitiendo a los médicos regular dosis de medicamentos sin necesidad de que el paciente vaya a consulta. (video)
- Confiable y seguro: mientras tengamos más interacciones con internet, la seguridad y la autenticación de los productos y servicios de IoT son primordiales. El uso de protocolos cifrados, la protección de datos recopilados y la gestión de la identidad son una necesidad. Un ejemplo perfecto es AWS IoT de Amazon que ofrece una plataforma segura y confiable para tus proyectos IoT.
- Inventar e innovar: la esencia de IoT radica en brindar oportunidades a inventar nuevas categorías de productos y servicios que mejoren la calidad de vida. Para que un producto sobresalga en su categoría, debe aportar un valor agregado a su propósito. Un ejemplo es Flood Beacon un dispositivo que mide en tiempo real el nivel de agua y manda alerta sobre riesgo de inundaciones.
- IEEE 802.15.4 , usado para Redes de Sensores Inalámbricos de área personal (WPAN) con tasas bajas de transmisión de datos es un estándar que completa la especificación Zigbee permitiendo comunicar dispositivos de bajo coste y velocidad. Se enfatiza el bajo coste de comunicación con nodos cercanos y sin infraestructura o con muy poca, para favorecer aún más el bajo consumo de batería.
- LoRa: es una especificación de bajo poder para dispositivos inalámbricos que operan a nivel regional, nacional o global. Podría decirse que es lo mismo que 802.15.4 pero a gran escala y es un protocolo que está tomando mucha fuerza actualmente.
- Bluetooth y NFC: tecnologías inalámbricas de corto alcance para redes de uso personal (PAN). Uno de los usos con más recorrido son los Beacons en el caso de Bluetooth BLE y control de inventario con NFC.
- Wifi y GSM: viejos conocidos que conviven en nuestros celulares, aunque ambos consumen bastante batería, permiten conectividad a internet. GSM es muy útil para proyectos donde los dispositivos se encuentran en movilidad constante, como por ejemplo un medidor de la cadena de frío de los alimentos que van en un camión.